La afección en la que el nervio pudendo queda atrapado o comprimido es poco conocido entre los pacientes, pero no por ello es menos frecuente. Esta compresión puede ocurrir en varios puntos, causando síntomas como dolor crónico en el área perineal, genital o anal, así como una sensación de ardor o entumecimientos del área genital.
En SUTURO consideramos que es necesario abordar dicho síndrome, ya que es el responsable de numerosos casos de dolor pélvico crónico, incontinencia y disfunción sexual que a menudo se diagnostican erróneamente o se tratan de forma incompleta.
Este trastorno es aquel que afecta al nervio pudendo. Dicho nervio se origina de la fusión de 3 raíces (S2,S3,S4) de la parte final de la columna vertebral. Tras su origen tiene un recorrido a lo largo de la pelvis y se divide a su vez en tres ramas finales: rama anal, rama perineal y rama genital que se dirigen al ano, al periné y a los genitales, respectivamente.
La función de este nervio es doble, ya que cumple funciones motoras y sensoriales. Por lo que podemos afirmar que este nervio controla la continencia urinaria y fecal, como el esfínter uretral externo y el esfínter anal, y, además, transmite la sensibilidad de la zona perineal, incluyendo los genitales externos, el ano y parte del recto.
A modo de introducción a este síndrome, debes saber que el síndrome de atrapamiento del nervio pudendo fue descrito por primera vez en 1987 por el neurólogo Dr. Amerenco, estudiando un paciente ciclista con dolor pélvico crónico.
Este se trata de un problema de salud que se caracteriza por dolor crónico a nivel de la zona pélvica (anal, perineal, vaginal o genital) y que se produce por un atrapamiento del nervio pudendo o de alguna de sus ramas.
Esta patología está caracterizada por afectar tanto a mujeres como hombres, resultando altamente incapacitante y condicionando en gran medida el día a día de quién lo padece. A pesar de que es muy frecuente, es poco conocido, y esto conlleva un importante retraso en su diagnóstico. De media, se estima que un paciente desde que inicia los síntomas hasta que se realiza un diagnóstico correcto pasan alrededor de 5 años en los que consulta de promedio 10-20 especialistas distintos (ginecólogos, urólogos, proctólogos, traumatólogos, psiquiatras…) y en los que es sometido a múltiples estudios e incluso cirugías no necesarias.
En cuanto a la causas, siempre indicamos a los pacientes de SUTURO que se desconoce en gran medida porque se desencadena un síndrome de atrapamiento del nervio pudendo. Es decir, no existe una causa concreta o definida que provoque dicho atrapamiento.
Se consideran que pueden existir diversos factores que favorecen su aparición. Estos se dividirían en factores predisponentes y factores desencadenantes del inicio de los síntomas.
Los factores predisponentes serían todos aquellos que provocan una alteración anatómica de la pelvis que favorece el atrapamiento del nervio. Estos podrían ser:
Por otro lado, los factores desencadenantes o “gatillo” del síndrome de atrapamiento del nervio pudendo son aquellos que en un momento dado desencadenan la aparición del dolor:
En equipo de Clínica SUTURO siempre le indica a nuestros pacientes que el dolor es el síntoma predominante y está presente en casi la totalidad de los casos. El dolor se puede manifestar de diferentes maneras e intensidad. Sin embargo, el dolor derivado de un atrapamiento del nervio pudendo, aunque variable de unas personas a otras, presenta una serie de características que ayudan al diagnóstico, y es que el dolor aumenta al sentarse, y es más intenso al final del día; mientras que el dolor disminuye al acostarse, al sentarse en el inodoro y es menor por la mañana.
Para poder entender mejor los síntomas que pueden aparecer, los agruparemos por la zona o zonas afectadas. Así tenemos:
Dolor, escozor, tenesmo rectal (necesidad de hacer deposiciones no necesarias), sensación de ocupación en el ano (sensación de tener algo dentro)
Dolor en periné en el hombre, dolor vaginal en la mujer.
Frecuencia miccional, urgencia miccional, dolor o escozor con la micción
Dolor o sensación de quemazón a nivel del pene, testículos en el hombre y a nivel de vulva, clítoris en la mujer.
Disfunción eréctil en el hombre, dolor en la eyaculación, dolor vaginal en la mujer en las relaciones sexuales…
Eso sí, debes tener en cuenta que cuando se produce una lesión del nervio o alguna de sus ramas finales se producen síntomas en los tres territorios o sólo en alguno de ellos. Por lo que no siempre de presenta de la misma forma.
El diagnóstico del síndrome de atrapamiento del nervio pudendo puede ser complejo, tal y como te hemos adelantado, ya que no existe una prueba única y definitiva que lo confirme de forma rápida o sencilla. Las pruebas de imagen (ecografía, TAC, resonancia) no permiten visualizar el atrapamiento, y sus síntomas pueden confundirse con otras patologías pélvicas frecuentes.
La clave está en una anamnesis detallada, exploración física con palpación dolorosa del nervio (signo de Tinel positivo) y la infiltración diagnóstica con anestesia local, que si mejora los síntomas, refuerza el diagnóstico. Es fundamental sospechar este síndrome en pacientes que no mejoran con tratamientos convencionales dirigidos a otros diagnósticos.
El tratamiento del atrapamiento del nervio pudendo debe ser escalonado y multidisciplinar, implicando a fisioterapeutas, anestesistas, urólogos, cirujanos y expertos en dolor, así lo llevamos a cabo en SUTURO.
El primer paso suele ser el tratamiento farmacológico con analgésicos y medicamentos específicos para el dolor neuropático, aunque su efecto es sintomático y temporal. Posteriormente, la fisioterapia especializada del suelo pélvico es clave para romper el círculo vicioso de dolor y contractura muscular, logrando una mejora significativa en muchos pacientes.
El siguiente paso tiene que ver con las infiltraciones del nervio con anestesia local, además de aliviar temporalmente el dolor, son una herramienta diagnóstica útil para confirmar el atrapamiento. Y, en los casos más avanzados, cuando se confirma el diagnóstico, la cirugía de liberación del nervio es la única solución definitiva. Actualmente, esta la realizamos mediante la técnica laparoscópica o robótica, que son mínimamente invasivas, y que son más precisas y seguras para evitar secuelas y permitir una recuperación rápida.
En SUTURO Salud contamos con la mayor experiencia a nivel nacional en la cirugía del nervio pudendo con estas técnicas. Nuestra experiencia supera los 40 pacientes intervenidos con una tasa de éxito global superior al 80%. Nuestros resultados conjuntamente con un enfoque multidisciplinar, nos ha convertido en centro de referencia nacional en el abordaje quirúrgico del nervio pudendo. Contáctanos.